armario en L

03/12/2009

El armario de mi abuela era especial, sólo podías entrar cuando ella te lo pedía. Era un armario empotrado, aparatentemente normal, pero cuando llegabas al extremo izquierdo continuaba por detrás de la pared de la habitación. Los trastos se adivinaban bajo la linterna de petaca, pero cuando uno quería profundizar un poco, ella te llamaba y te metía prisa para que salieras. El otro día estuvimos vaciándolo y se había estrechado, aún así, conseguí hacer la ele y situarme detrás del tabique. Mientras recogía una vieja aspiradora en la penumbra, me sorprendió un resquicio de luz  que se filtraba a través de un pequeño agujero en la pared, en aquel momento mi madre golpeó  el muro y tuve que salir.

enviado esta semana a la ventana de millás.

El armario de mi abuela era especial, sólo podías entrar cuando ella te lo pedía. Era un armario empotrado, aparatentemente normal, pero cuando llegabas al extremo izquierdo continuaba por detrás de la pared de la habitación. Los trastos se adivinaban bajo la linterna de petaca, pero cuando uno quería profundizar un poco, ella te llamaba y te metía prisa para que salieras. El otro día estuvimos vaciándolo y se había estrechado, aún así, conseguí hacer la ele y situarme detrás del tabique. Mientras recogía una vieja aspiradora en la penumbra, me sorprendió un resquicio de luz  que se filtraba a través de un pequeño agujero, en aquel momento mi madre golpeó la pared y tuve que salir.

3 respuestas to “armario en L”

  1. peni Says:

    precioso…muy logrado

  2. pablodelarua Says:

    Me ha gustado, muy conseguido. un saludo.


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